domingo, 20 de septiembre de 2009

A mi mente

...me buscaste, y me buscaste hasta el cansancio, y si, me cansaste, me cansé de negarte lo que tanto deseas, me cansé de decirte mil veces no, cuando en realidad dudo sobre mi, me cansé de dudar, derribaste mis defensas, sometiste mi voluntad, y como no encuentro satisfacción voy a cumplir tus deseos, no por mi, sino por ti, no por bueno sino por aburrido, harto, saturado, tampoco lo hago porque sea tu voluntad sino por tu insistencia. Me ha molestado tanto que me persigas durante tanto tiempo acosandome y sacando provecho de mi debil caracter, que por fin sembraste la duda en mi de saber, de conocer, de preguntarme que se siente, como será. Por eso esta noche te espero, acostado en mi cama, solo como todas las noches, de espaldas, desnudo, para que por fin me inicies.

1 comentario:

  1. No te preocupes. Sólo esta vez. Te haré mi hembra, tanto como pueda y como sepa. Intentaré hacerte feliz, aunque me quede insatisfecho, sabiendo que no habrá una segunda oportunidad para amarte mejor. Solo esta vez. Necesito poseerte, sentir-te sometido a mi, mirar tus ojos de hembra poseïda... Y se que será mucho peor que si, ahora mismo, te dejara por insensible y antipático. Solo una vez, para mantener el recuerdo de un sueño que se hace realidad, realidad evanescente y agonizante... Ven, que tienes un botón que deseo aflojar...

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